Borrachos de...atar o el folklore de uno mismo.

A juzgar por la intimidante aglomeración de banderitas y ese himno que parece compuesto a golpe de vajilla rota, no sé si he escogido el mejor fin de semana para ir a Madrid...Rematamos con una visita a la iglesia de la Ciencialogía y el descubrimiento de la auto-proclamada -sí, sí... cómo mola "autoprocalmarse"- mejor pintora del apocalipsis. Su historia merece un punto a parte. Así que punto a parte.

Episodios esperpéntico-vallinclanescos al margen, hemos hablado de política y series de televisión y Brian de Palma y Berlanga y Christopher Lambert. Hemos visto el Reina Sofía, posado cual Pe en el último Hola, revivido los hits del Fib de 1997 en un antro de nombre genial: Luke, soy tu padre, paseado entre plantas carnívoras y bonsais de ex-ex-presidentes del gobierno, saboreado el salmorejo del Pez Gordo. Siesta al sol en el Retiro. Ruta de librerías. Dosis generosas de alcohol y ropa ahumada... porque hay que ver cómo se impregna uno de la noche en Madrid. Incluso he ampliado mis horizontes laborales. Todo muy bien... y eso que me robaron la cartera en el reñido Barca-Madrid, que vimos en un terrible pub irlandés, entre primos asturianos. Y como siempre, me faltó visitar al grandisísimo Goya.
Total, que aquí estoy, posando chulesca y tontamente con Mrs. Rubén. La foto la hizo Ainhoa, que pudo hasta con los pimientos... y eso que detesta los pimientos, sean del color que sean. Yo creo que la clave está en los vermuts de grifo. Y es que si a Madrid le sobran muchas cosas, a Barcelona le faltan otras. Ya mismo los reinvindico...