lunes, 12 de diciembre de 2011

2011...

Un año difícil, así que me apresuro a clausurarlo.
Podría sacarle punta y algún chiste pero me bastará con decir, sin pudor alguno, que este año me he sentido algo más huérfana. Aunque mi padre se saliera con la suya rápido y bien (¡a lo John Wayne!), a la que sí perdí, perdimos todos, fue a Joana. Y no le tocaba.
Así que de este año sólo salvo a Pandémica, tres maravillosos viajes (Suecia, USA y Grecia), una cena en el Velódromo (que ni siquiera sé si es de éste o del anterior), una exposición, mi catarata de mails con Lila -a quien echo escandalosamente en falta-, así como una escueta lista de lecturas... porque, a todo esto, este año he leído poco, pero he leído bien. Nada menos que cuatro obras maestras.
Pantallazo de Skype. "Querida, a veces hay que saber ponerse una patata frita en la nariz y fingir que es un moco".












    LA LISTA:
La estética de la resistencia (inacabado), Peter Weiss
A sangre fría, Truman Capote
Música para camaleones, Truman Capote
Formalismo puro, David Bestué
Nueve cuentos, J. D Salinger
Homenaje a Cataluña, George Orwell
Gente independiente, Halldor Laxness
El regreso de la vieja dama, Friedrich Durenmatt
Cumbres borrascosas, Emily Bronte
La vista desde Castle Rock, Alice Munro
Vigilar y castigar, nacimiento de la prisión, Michel Foucault
Les vièrges et autres nouvelles, Irene Nemirovsky
La economía no existe, Antonio Baños
Walden (inacabado), Henry Thoreau
Moby Dick, H. Melville                                             
Homenots I, Josep Pla
El gran sueño del paraíso, Sam Shepard
Orange is not the only fruit, Jeanette Winterson
Escritos & Hotel Palenque, Robert Smithson
Teigmouth Electron, Tacita Dean
La tumba del tejedor, O’Kelly
Las olas, Virgina Woolf
Testimonios tangibles, Nora Catelli
Yo y la energía, Nikola Tesla
Doctor Glas, Hjalmar Sodeberg
El maestro Juan Martínez que estaba allí, Manuel Chaves Nogales

Con Clara, en la isla Höo.

 

Pero, entre todos, seguiremos adelante... hacia el 2012 (que como cifra es más bonita).

6 comentarios:

Andrés dijo...

Pues vaya lista (para haber leído poco). Y lo siento de veras por las pérdidas. ¡Suerte para el año que comienza!

Leandro dijo...

Yo hubiera puesto en negrita también A Sangre Fría de Capote, los Nueve Cuentos de Salinger y El Gran Sueño del Paraíso de Sam Shepard; y en negrita y mayúsculas, Moby Dick. El año que entra no promete gran cosa, pero algún momento bueno traerá, seguro. Ánimo

Por la tangente dijo...

Gracias x los Ánimos. Andrés, este año cayó poco libro de arquitectura... Leandro:
A Sangre Fría- me leí otro de Capote de lo que lo disfruté. Salinger a veces mi irrita y otras me apasiona. Hay uno de los nueve cuentos que leí dos veces. Y fragmento de otro, muy especial. El de Sephard me pareció irregular. Me gustaron tres bastante (el de una urna en un coche, el del caballo y el muro de berlín) pero el resto me dejó bste igual. Mmm creo que descartando los que ya puse en negrita, que son GIGANTES, he disfrutado mucho a Alice Munro (la seguiré), el del Doctor Glas y Homenaje a Cataluña. Hay fragmentos del ensayo de Catelli que son un deleite y los retratos de Pla, claro. Cualquier día me zampo los 36 tomos ¡Y ya!

pandémica dijo...

Por la tangente,
Los coletazos que das por las mañanas son cada día más fuertes. ¡Surcan el Atlántico! Y el sonido grave que emiten es de lo más imprevisiblemente bonito. Como en las ballenas.

Leandro dijo...

Hay muchos de la lista que no he leído, pero tomo nota de lo que dices. Salinger siempre me gusta, cada vez que lo he leído; pero es cierto que irrita a mucha gente y a casi nadie deja indiferente. Tú tienes un pie en cada orilla. Discrepamos con Sam Shepard, pero no en todo: Un trozo del muro de Berlín es una pequeña maravilla

Andrés dijo...

No ha caído ninguno de arquitectura, pero me ha gustado tu versión del 11M desde el punto de vista del arquitecto. ¡Convenzamos a EGM de que no abandone! A.