lunes, 1 de octubre de 2007

Fenómenos Extraños.



Cuando fui por primera vez a la Alhambra era tan pequeña que no mostré mucho interés. De hecho, monté un circo a mis padres porque no eran capaces de darme una explicación convincente a mi única pregunta: ¿Y dónde están todos los muebles?
Entonces, para mí, un palacio se parecía más a la casa de Tom Hanks en "Big" con sus colchonetas y juegos, que a lo que vi ahí: que si jardines y fuentes y techos con estudiados relieves y más jardines y más fuentes.
La semana pasada volví y la Alhambra me pareció un lugar impresionante. Entre tanto Horror Vacui me chocó su austeridad. Sus paredes y portones, era tan imponentes, estaban tan presentes... Alguien me sugirió que la escuchara. Y sí, se oían ecos, rumores que se perdían de una estancia a otra. Cuanta vida... Hasta las paredes supuraban agua pero aún así, no sentí que aquel espacio me ahogase, sino todo lo contrario. Ahora tiendo a pensar que de haber tenido muebles, se los debió llevar la corriente, cuesta abajo, formando lo que hoy es el Albaicín, por eso las calles son tan imposibles.

Por cierto, no muy lejos de ahí tomé una foto de un hotel abandonado. Se la dedico a Ainhoa (Por los pelos), porque un día que estábamos paseando por Barcelona señaló hacia un edificio y dijo: Mira, Beirut. Entonces me comentó que era un juego que hacía a veces. Encontrar en Barcelona trozos de otras ciudades. Estos días, en Granada, vi algo de Los Angeles y un cachito de Miami. Lo bueno es que no he estado en ninguna de estos dos sitios. En París, sin embargo, en más de una ocasión, me confundí la rue des Pyrénées con la de Aribau... ¡y no será porque no la he recorrido veces! Al final, alguien me chivó la respuesta: Es por los árboles que son iguales.
Con la tontería, he pensado que sería chulo hacer un libro así, con rincones y calles que se traspapelan y acaban en Helsinki o Milán. En su prólogo citaría a Calvino y Las ciudades invisibles, por supuesto... Ya. Ya sé que soy pesada. Pero ¿a que sería chulo?

8 comentarios:

g_ dijo...

Pues HAZLO.

Anónimo dijo...

Ese día también vimos Budapest.

Anónimo dijo...

Ay, Sra Tangente! que ha crecido ud! Pues claro que es imponente. Es (será, quiero que sea,...) mi residencia de invierno, y la de verano: Versalles.

Anónimo dijo...

Ay, Sra Tangente! que ha crecido ud! Pues claro que es imponente. Es (será, quiero que sea,...) mi residencia de invierno, y la de verano: Versalles.

Anónimo dijo...

Pues a mí también me pasaba en China. En Hong Kong veía cachitos de Nueva York y de Tokyo, ciudades en las que no he estado en mi vida. Shanghai tenía a veces calles londinenses y francesas de provincias, cosa no de extrañar teniendo en cuenta la importante presencia extranjera que hubo. En cuanto a mi querida Pekín... Parecía la Zona Franca o Vladivostok (digo yo, por el frío atroz y la arquitectura comunista), y la calle de Wangfujing (una arteria comercial muy conocida que todo turista que haya ido conocerá) me recordaba el Portal de l'Àngel pero a lo bestia.

Anónimo dijo...

Sí, McFly, visita rincones trotamundos y calles nómadas y cuéntanos dónde han ido a parar y qué es de su errante vida.

Anónimo dijo...

El colegio que hay al lado de Arc de Triunf es Italia, y como NY las vias del tren que pasa por debajo de Almogavares en Poble Nou. Eso es lo que me dice Jesús cuando pasamos por esos sitios para que no me de pena no haber estado allí.

Anónimo dijo...

me encanta lo del libro. yo te ayudo si hace falta. mola.