En caída libre

"Turner experimentó desde el comienzo con las perspectivas en movimiento. Cuenta la leyenda que se hacía atar al mástil de un barco que realizaba la travesía de Dover a Calais para así poder ver cómo cambiaba el horizonte. En 1843 o 44 mantuvo la cabeza fuera de la ventanilla  de un tren en marcha durante nueve minutos exactos y el resultado fue una pintura llamada Rain, Steam and Speed -The Great Western Railway. En ella la perspectiva lineal se desvanece de fondo. No hay resolución ni punto de fuga ni una visión clara del pasado o del futuro. (...) La cuestión del horizonte empieza a flotar, por así decir." Hito Steyerl. Los condenados de la pantalla.

Rain, Steam and Speed -The Great Western Railway